2012
01.26

Hoy estoy nerviosa. Quizás porque hablaré de Chaplin, quizás porque tras meses de parón estoy planteando matar a la óptica de mi cámara ( tristemente estropeada) por volver a poner el bombín a varias cabezas más.

Esta noche me han invitado a la Asociación Cultural “El Arco de la Virgen” para presentar la película de Charles Chaplin “The Kid” en el que UBJK nos interpretará en directo la banda sonora. Así que con este propósito, y como todo suele tener un trasfondo que enlaza todo ( Chaplin-Bombín-Proyecto) y sin salirme de la tónica de este blog, me gustaría compartir con vosotros este trocito de pasión cinematográfico.

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The Kid, El Chico. 1921. Charles Chaplin.

“Una película con una sonrisa y, tal vez, una lágrima” Así es como empieza la obra producida y dirigida por Charles Chaplin. El Chico, (The Kid) creada en el año 1921, no es sólo una comedia melodramática, es también la historia de un antes y un después en la creación de Charlot el vagabundo. Un camino que empieza en el inicio de sus cortos y se define, cómo si de un alma acabada se tratara, a partir de las primeras películas con la First National. Es a partir de este film donde se empieza a comprender que Charlot es algo más que un payaso.

Se dice que esta película tiene reminiscencias con la infancia de Charles Chaplin cuando vivía en los suburbios de Londres, incluso podría llegar a identificarse cómo si de una novela de Charles Dickens se tratara. Aún así, El Chico es la historia entre el Vagabundo (Charles Chaplin) y un pequeño granujilla huérfano (Jackie Coogan) que tras ser abandonado por su madre es rescatado por Charlos, quién lo educa hasta los cinco años y con ello se convierte en su inseparable compinche. Una historia llena de crudeza bailando al son de la comedia en las que el destino siempre acecha con la separación.

En 1928 Federico García Lorca decía: “En ninguna estética se ha usado el llanto de esta manera tan pura. El llanto ha sido siempre una consecuencia. Charlot hace del llanto causa, fuente aislada sin relaciones con el tema que lo produce. Llanto redondo. Llanto en sí mismo.”

Marta Sánchez Natera